miércoles, 2 de noviembre de 2011

Bibliófilos

Las burbujas de los libros viejos

Ejemplares únicos de primeras ediciones de autores clásicos alcanzan récords de precios en las subastas

SERGIO C. FANJUL - Madrid - 02/11/2011



¿qué es lo que hace deseados estos libros? "Tiene mucha importancia el ejemplar: tratándose de un libro antiguo, descatalogado, no puede tener el mismo precio un ejemplar que está en perfecto estado, incluso sin abrir, que un ejemplar manoseado, sucio o roto...
También influyen ciertas modas bibliófilas: "El libro antiguo también está sometido a modas: libros del XVII con grabados, del XVIII de viajes... Ahora la moda es la literatura contemporánea", dice Pepe Grau. "Otro ejemplo: la mafia rusa está comprando muchas primeras ediciones del James Bond, el agente 007, de Ian Fleming. Son libros de kiosko, en papel malo, pero debido a este interés de la mafia, se han revalorizado". Los libros antiguos, pues, también sufren sus burbujas.
Como ven, no solo los libros entran en este juego de subastas. "También aparecen objetos relacionados con escritores o personajes famosos. Fotos y cartas son lo más abundante, buscando el autógrafo. Pero también objetos personales, como gafas o estilográficas. Incluso he visto subastar la mesa de despacho del escritor. Y en España se subastó un piano de García Lorca. En el mundo anglosajón son muy aficionados a las subastas de memorabilia, objetos de papel de todo tipo. 
Estos son algunos de los libros más caros, además de algunos objetos de ciertos autores, según una lista elaborada por el tasador Felipe Martínez:
- Los Philosophiae naturalis principia mathematica (Londres, 1680) de Isaac Newton, más conocidos como los Principia, donde describió la ley de gravitación universal y estableció las bases de la mecánica clásica se valoran en 300.000-400.000 ¤.
- La Biblia de Johann Gutenberg, o "de 42 líneas" (entre 1450 y 1456, el primer incunable). Fue el primer libro que se imprimió en la imprenta de tipos fundidos. Sólo han sobrevivido 47 ejemplares de esta obra. En torno a los 6.500.000 ¤.
El Quijote, de Miguel de Cervantes, en una primera edición completa y en estado aceptable, de 1605, podría alcanzar los 1.500.000-2.000.0000 ¤.
- Una primera edición normal del Ulises de James Joyce (1922), en buen estado pero sin dedicatoria ni otros valores añadidos, podría alcanzar unos 15-20.000 ¤. 
- Una nota manuscrita de J. D. Salinger a su empleada del hogar se subastó recientemente por 36.500 ¤.
- Diez dibujos de Federico García Lorca han sido comprados recientemente por el Ministerio de Cultura por 100.000 ¤.
"El bibliófilo es, generalmente, una persona con estudios, que ha desarrollado su vida al lado de los libros. Su tendencia coleccionista la avivan hallazgos valiosos de obras, con los que quiere continuar. Pero es una labor que nunca termina pues siempre parece incompleta. Hay bibliófilos en todos los estamentos sociales. Desde el currante humilde que va acumulando libros en su piso hasta el académico o ministro que puede gastar en un local para almacenarlos. También hay bibliófilos selectivos que buscan sólo un tema o sólo compran libros muy antiguos. Pero, en cualquier caso, siempre se excede en la cantidad", explica José María Gómez.
Existen muchas leyendas acerca del romanticismo obsesivo del bibliófilo, que llena habitaciones y casas enteras de libros, y que acaba aplastado por ellos. "El bibliófilo almacena las obras si tiene almacén. No los lee, es imposible, los hojea el día de la compra, pues enseguida hay que atender otras compras. Esto no quiere decir que no disfrute ordenándolos y enseñándolos. Pero esto es una cuestión de tiempo y economía. Desgraciadamente hay muchos bibliófilos con libros en cajas de cartón apiladas en un desván de la casa del pueblo". Los libros también son peligrosos. Tengan cuidado: se pueden convertir en un mal vicio.
Fuente: elpais.com (Texto adaptado)